La LeyDedicado a mis tías María y Lucía Velasco, Rosario Labrador, Casilda y Carmen Maíllo, Victoria y Carmen Gutiérrez,Feli, Marga, Tere y Carmen.
Conviene no olvidar que en las elecciones del 27 de mayo lo que está en juego es el gobierno municipal y autonómico, nada más y nada menos. Lo digo, porque en plena campaña mediática se oye de todo. Aquí sale a relucir, el 11M, de Juana Chaos, el Estatut, las pensiones, las candidaturas abertzales, el alto el fuego, etc.. Todo eso se mete en una coctelera y sale de una u otra forma, en forma de declaraciones, juicios de valor, confundiendo al ciudadano.

En Béjar, lo que nos jugamos es el equipo y la persona que se va a sentar en la Plaza de Maldonado nº 7 y regirá los destinos del municipio por los próximos 4 años. Vista la trascendencia del tema, conviene pues reflexionar y meditar sobre el sentido de nuestro voto y sobre la mejor alternativa.

DelphiEn estos últimos meses estamos asistiendo al drama que se está viviendo en la Bahía de Cádiz, en la que la multinacional de componentes del automóvil Delphi ha manifestado su intención de cerrar la factoría y a la lucha de los trabajadores para conservar su puesto de trabajo.
Cuando ocurre un suceso de estas características existen numerosos prismas para hacer una lectura del mismo.
El primero y más dramático es sin duda el de los protagonistas, los trabajadores que pueden ir a engrosar las filas del desempleo en una zona con una alta tasa de paro. Es comprensible y encomiable el deseo de estas personas por conservar sus puestos de trabajo y la lucha que desarrollan, promueve sin duda la solidaridad.

La Ley¿Qué les parecería si en lugar de respetar las normas que regulan la convivencia entre los ciudadanos, cada cual hiciera “de su capa un sayo” y las cumpliera o no según le viniera en gana? ¿Cómo se puede exigir a los ciudadanos que las cumplan si el propio Consistorio no lo hace? ¿Con qué autoridad se le puede pedir a un ciudadano que se atenga a la legalidad, si el Ayuntamiento es el primero en saltársela?

Pues esto es lo que el Equipo de Gobierno de nuestro Ayuntamiento parece no entender. Parece no darse cuenta de lo importante que es el cumplimiento de las normas en nuestro estado de derecho. Parece nuestro Ayuntamiento olvidar que la autoridad municipal, en este caso, debe dar ejemplo y ser la primera en cumplir toda la normativa legal.

La pregunta que en estos días se hacen los bejaranos es si en Béjar están asegurados dos de los derechos esenciales de nuestra democracia: la libertad de expresión y la seguridad física. La respuesta en estos momentos es desgraciadamente, negativa. Ni la libertad de expresión ni la mínima seguridad totalmente necesaria para ejercer el resto de los derechos están garantizadas en nuestra querida ciudad.

Cerrallana 1Corre el alcalde de Béjar de un lado para otro, como un poseso, haciéndose fotos con personajes de fuste, para prometer al pueblo de Béjar que van a hacer un hospital de alta resolución, una central fotovoltaica, una fábrica de paneles solares, otra de gambas a la plancha y no sé cuántas cosas más. Azuza sin descanso a la brigada municipal de obras y saca compulsivamente a licitación paquetes diversos de suministros de materiales y obras para acabar, a la brava, unas instalaciones deportivas donde se puedan lavar la cara y la vergüenza, él y sus obedientes y mudos concejales, antes de las elecciones. Unas instalaciones deportivas a las que el pueblo de Béjar ya ha puesto nombre: FUERTE ALEJO, por su siniestro parecido, en el fondo y en la forma, con aquellos cercados que la caballería americana levantaba en las tierras del lejano oeste antes de que llegara la ley y el orden.

Béjar FMBéjar FM ha logrado en un tiempo récord volver a emitir con normalidad. La antena ha sido reparada al menos de forma provisional y ya está bien orientada y emite a plena potencia. Felicitamos a Luis Ibañez y a su equipo por haberlo conseguido en tan pocos días. Ha sido necesaria la intervención de un camión grúa, con el que se ha podido volver a levantar el mástil roto. Posteriormente se han soldado los hierros que se habían doblado y la antena se ha arriostrado, reforzando los anclajes y reponiendo los que estaban rotos.

La libertad de expresión es el mejor índice para la medida de la democracia en una sociedad. En Béjar esta libertad está seriamente amenazada. Este fin de semana, unos desaprensivos han echado al suelo la antena que la emisora Bejar FM tenía en la Cruz del Peladillo. Nos consta que Bejar FM ha presentado ante la policía la correspondiente denuncia, que esperemos aclare la situación.

Milhojas de foie, jamón y salmón, con reducción de balsámicoComo estamos en periodo electoral, es el momento de reflexionar sobre lo que funciona bien, lo que se debe cambiar, sobre qué es lo que han hecho los que han mandado en estos 12 años de desgobierno Alejil y qué tal ha funcionado la oposición. Estas son las reglas de la democracia, que es el menos malo de los sistemas políticos que conocemos. Cada cuatro años hay que pasar ese examen y el tribunal lo forman todos los ciudadanos con derecho a voto. También es el momento de realizar propuestas para que sean conocidas y debatidas por los ciudadanos, aquí proponemos la nuestra sobre la Escuela Bejarana de Hostelería y que ha surgido en algunos comentarios de nuestros lectores.

Nostálgica estaciónParece que el Ayuntamiento no ha tenido bastante con el revolcón que le ha dado la Comisión Territorial de Urbanismo en el tema Glorieta. Nos consta que, tras leer las alegaciones presentadas, que han sido publicadas en esta revista y en las que se argumentaban detalladamente las razones para su no aprobación, la CTU decidió la no aprobación de dicha modificación puntual, poniendo en entredicho todo el proyecto así como el convenio urbanístico firmado con anterioridad.

Entre fábricasRecomendamos a los lectores que adquieran en cualquiera de las librerías de nuestra ciudad, el nº 10 de la Revista del CEB, dedicado esencialmente al patrimonio industrial de Béjar. Si el Sr Alcalde y los Concejales del Equipo de Gobierno leyeran esa revista, que por cierto patrocina el Consistorio, sencillamente deberían recluirse en algún cenobio, para poder soportar la mirada de los bejaranos cuando conozcan el juicio que se hace sobre su actuación. El problema estriba en que es muy probable que estos señores no lean, ni esa ni ninguna otra cosa, porque da la impresión de que la cultura no solo no es su fuerte, sino que les importa un ardite.