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Visiones de Béjar (42): Así vi la Semana Santa (primera parte)
Como en toda celebración que se precie -y en Béjar no podía ser menos- donde se mezcla la fiesta y la tradición, lo religioso y lo pagano, el que dichas celebraciones se produzcan y perduren en el tiempo es para estar de enhorabuena. A lo que, sin duda, contribuye, por encima de todo, el inestimable trabajo de las personas que, por encima de cualquier ideología, las hacen posible.
En Béjar se sigue, año tras año, dando un paso en este sentido, un paso más, y nunca mejor dicho, con ocasión de los actos programados para la celebración de la Semana Santa. Desde cierto punto de vista, se puede entender la celebración de la Semana Santa como un acto social lúdico, cultural e informativo, de múltiples caras, en el que, con el motivo originario de la conmemoración de la muerte de Jesús de Nazareth, tienen lugar actos colectivos de toda índole, como conferencias, discursos, ritos, oraciones colectivas y demás parafernalia con tintes religiosos, en este caso católicos y para nada fanáticos, en el que el evento principal es el constituido por las procesiones de penitentes acompañando a imágenes o “pasos” que representan a distintos personajes o episodios de los hechos ocurridos hace ya más de dos mil años en Palestina y que, con el tiempo, se han convertido, en algunos casos, en "tesoros" de enorme valor histórico, artístico o simplemente social.
Fieles a su cita, como cada año, las gentes de Béjar (las pocas que van quedando, desgraciadamente) han celebrado su Semana Santa. Esperemos que esto no siga decayendo, me refiero, sobre todo, a las personas que hacen posible que esta cita se vaya realizando y perdurando en el tiempo, año tras año, lustro tras lustro, década tras década, centenario tras centenario (como es el caso de cofradía de la Santa Vera Cruz que este año conmemora su creación hace la friolera de 600 años).
Para que esto no suceda, es decir, que la celebración de la Semana Santa en la ciudad de Béjar no decaiga, (lo digo porque he asistido este año a alguna de las procesiones que se han podido llevar a cabo, teniendo en cuenta la meteorología y, la verdad, no he podido por menos que recordar y comparar las procesiones multitudinarias de personas apostadas a lo largo de su recorrido de hace 30 o 35 años, cuando en mi niñez mis padres me llevaban de la mano para no perderme de ellos entre tanto gentío, aunque entonces todos fuéramos mayoritariamente de Béjar), pienso que es nuestro deber seguir con lo que tenemos hasta ahora y dejarles el legado a nuestros descendientes, para que ellos puedan seguir con las tradiciones y si me apuran mejorarlas.
Para que esto último pueda suceder, creo indispensable que nos “pongamos las pilas”, me refiero tanto a los que están más implicados directamente en estos actos litúrgicos solemnes, como a la población de Béjar en general.
Miren, en las procesiones hasta la fecha a las que he podido asistir este año (escribo este artículo el día 20, miércoles), he podido ver muchas caras jóvenes, tanto en los desfiles como por las calles, esperando ver sin duda a algún amigo o pariente con el tambor o la trompeta o portando las imágenes o haciendo algún otro cometido en los desfiles; sin duda, personas que pueden ser el futuro de esta celebración de la ciudad en los próximos años; por el contrario, he podido apreciar también las mismas caras que en años precedentes entre la organización, con años ya de solera en esto, por lo que creo que debe haber un relevo generacional en este último aspecto, si queremos que esto perdure. Espero que tome buena nota de ello el Excmo. y Rvdmo. Sr. Obispo de Plasencia Lid. D. Amadeo Rodríguez Magro.
Savia nueva, sí, que, como en política, y ahora más que nunca, debe correr por las venas de esta ciudad, Béjar, cargada y rica en tradiciones y patrimonio histórico, no solo en lo religioso, sino en otras múltiples facetas.
Esta Semana Santa, es un hecho que nos ha dejado y nos dejará estampas bonitas y pintorescas que da el discurrir de los pasos e imágenes por nuestras calles, pero no solo ha habido procesiones, como decía mas arriba, se han celebrado numerosos actos litúrgicos y sociales, empezando el día 3 de abril, con la XXVI Marcha pro Semana Santa, organizada por la cofradía de la Santa Vera Cruz, con un recorrido podríamos decir típico de una marcha senderista de trazado local, es decir una marcha prácticamente al alcance de todos. Lástima que el mal tiempo desluciera la jornada (yo no asistí, me hubiera gustado haberlo hecho, como el año pasado).
El sábado día 9 de abril tuvo lugar el Pregón de Semana Santa a cargo del ya mencionado Obispo de Plasencia, con numerosos actos paralelos, como la actuación de la banda municipal, organizados por el Ayuntamiento.
Del 11 al 19 de abril se celebró la novena a Nuestro Padre Jesús Nazareno, con el consiguiente besapiés del mismo, cada día.
El viernes día 15 de abril, Viernes de Dolor, tuvo lugar, a cargo de la Hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno y Nuestra Señora de las Angustias, el XIX Viacrucis de La Antigua (adjunto fotos 1 a 6).
El domingo 17 de abril, Domingo de Ramos, tuvo lugar la Misa y Procesión de la Entrada de Jesús en Jerusalén (adjunto fotos 7 a 12).
El Lunes Santo, del 17 al 19 de abril, tuvo lugar el Triduo a Nuestra Señora de la Soledad, bajo el auspicio de la cofradía de la Santa Vera Cruz. El lunes 18 se llevó a cabo el Viacrucis en procesión.
El martes 19, procesión también, esta vez de Nuestra Señora de la Soledad, aquí tengo que decir que su recorrido por las calles quedó mermado por las inclemencias del tiempo (adjunto fotos 13 a 21).
Y bueno, apreciados/as lectores/as, hasta aquí he llegado en este artículo, mitad crónica, mitad información, mezclado con un poco de documento fotográfico. Permanezcan atentos a la pantalla de su ordenador en el dial de Internet Béjar.biz. Les emplazo para una segunda parte, quizás tal vez una tercera, depende de lo que dé de sí esta Semana Santa, de lo que de ella quede y de cuantos actos procesionales puedan desarrollarse. Les cito para hacer juntos algunas reflexiones sobre la misma no exenta de alguna crítica cuando sea necesaria, como siempre constructiva, de las cuáles podrán surgir algunas ideas para una posible mejora o imbricación social de estas tradiciones, ideas que espero no caigan en el olvido y, ahora más que nunca, que se acerca el 22M con las elecciones a los ayuntamientos y las cortes regionales a cuestas, a lo mejor a nuestros políticos se les ilumina la “bombilla”. ¿Quién sabe?
Atentamente,
Paulino Aliseda Hoya
Paalho68@hotmail.com
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