Por Cipriano González. Alcalde de Béjar
Desde la ligera distancia que me he dado este año para mirar y participar en las fiestas y ferias de septiembre, no puedo por menos de reconocer que, incluso a pesar del día lluvioso del viernes y la supresión del concierto de DOVER, habéis comprendido bien el mensaje que en el saluda de estas fiestas os recomendaba y que tenía que ver con la participación, permitidme que os lo recuerde:
“El año pasado os invitábamos a participar de forma activa y comprometida y a fe que lo hicisteis, este año os invitamos a profundizar en esa misma participación, a tomar la calle en el sentido más lúdico y cívico, a disfrutar de lo nuestro.
Béjar tiene que recuperar la fiesta en la calle, por eso pedimos la comprensión de aquellos vecinos que puedan sentirse perjudicados o de los conductores por las molestias que se les podamos ocasionar… A todos les pedimos un poquito de tolerancia durante estos días: va en beneficio de todos”.

Hoy, domingo, víspera del día grande, he podido comprobar con mis propios ojos uno de los efectos perversos de esa participación masiva: el penoso estado en que habían quedado las principales calles y plazas de nuestra ciudad, las botellas de cristal medio llenas, las de plástico, las bolsas, los vasos de plástico y de cristal, los cascos rotos y repartidos por las aceras, por los jardines, por el parque, por las calles… daban una imagen de la ciudad que hubiera sufrido los efectos de una catástrofe natural y no, no era eso, eran los restos de un numeroso grupo de personas que habían estado disfrutando de una noche festiva y que después, sin ningún pudor, dejaban los restos para que otros trabajadores se dedicaran a recogerlos. Desde las seis de la mañana llevaban recogiéndolos. Gracias por vuestro trabajo. Por informar a todo el mundo de la cantidad de los residuos recogidos: se llenaron todos los contenedores de la zona, tuvimos que recuperar nuevos contenedores para que pudieran seguir las empresas de limpieza depositando los residuos y al final tuvimos que recurrir a CESPA, la empresa que recoge los contenedores, para que los vaciara y así pudieran servir para el resto del día.
Me consta que algunos ciudadanos llamaron al Ayuntamiento para denunciar la suciedad de algunas calles. Las brigadas de limpieza estaban desde las seis de la mañana y los técnicos municipales también. Era imposible dada el nivel de suciedad el poder resolverlo en un tiempo razonable.
¿Qué os quiero pedir? Primero: me alegra ver que la gente se divierte y que ha seguido los consejos, pero me entristece comprobar, en algunos ciudadanos, la ausencia de sensibilidad para tras la fiesta depositar en el contenedor los restos de la misma ¿Cuesta tanto?. Segundo: La práctica de un consumo responsable y el sentimiento de que la ciudad es de todos y no de unos pocos que por la noche, al amparo del alcohol y de la hora pueden hacer de la calle un auténtico vertedero. ¿Tendremos que volver a recurrir a la autoridad?
Resolver esto cívicamente es nuestra asignatura pendiente: quedan tres días, el lunes, por convenio no se recogen los residuos de los contenedores, es uno de los tres días que tienen en su convenio estos trabajadores y hay que respetarlo. OS RECUERDO: MAÑANA LUNES NO SE RECOGE LA BASURA y os invito a todos los bejaranos a que desde la máxima responsabilidad personal que puedan, contribuyan a dejar una ciudad más limpia. El esfuerzo si es de todos es mucho más rentable, de lo contrario habrá que tomar nota y convertirlo en medidas de cara a próximos eventos.
Que siga la fiesta, que siga el disfrute lúdico y que nos sensibilicemos con el respeto al entorno que será la mejor forma de divertirnos.
Cipriano González Hernández
Alcalde de Béjar