La web www.fisterra.com, orientada principalmente a la atención primaria, es la de mayor difusión en el mundo de habla española.

La Voz de Galicia

FisterraA principios del año 2000, el bibliotecario del Juan Canalejo, Carlos González-Guitián, y dos médicos del centro de salud de Cambre, Arturo Louro y Joaquín Serrano, creaban el portal www.fisterra.com. Casi siete años después, esta página sanitaria, orientada principalmente a la atención primaria, es la de mayor difusión en el mundo de habla española, y lleva tres años siéndolo, según un informe de la Fundación AUNA. Tiene unas 35.000 visitas al día, palabras mayores para portales españoles. Ha recibido numerosos premios, como el de la mejor página sanitaria en lengua española.

La web ha crecido tanto que sus creadores han dado un nuevo paso: constituir la Fundación Fisterrae. La Xunta la ha catalogado como de interés sanitario, según publicaba el DOG. Su cometido será, sobre todo, la divulgación de la sanidad y de la ciencia Galicia, o relacionada con la comunidad, además de la creación de una base de datos y de aplicaciones informáticas nuevas, señala González-Guitián, que ejercerá de presidente de este organismo.

La razón por la que se ha optado por la declinación latina y no por el topónimo exacto es que, en materia de fundaciones, los nombres de lugar exigen determinados requisitos que, en este caso, no se cumplen. Pero lo que importa es el mensaje.

Y el mensaje es Fisterra. Cualquier persona que indague en cualquier buscador por Fisterra tendrá, antes que cualquier otra cosa, antes que el propio municipio o las páginas turísticas, este portal. El nombre del pueblo es, de este modo, mucho más conocido aún. Tampoco es que le haga mucha falta: Fisterra, Finis Terrae, Finisterre... Son nombres cuyo atractivo significado (y, ya puestos, también fonético) es usado por numerosos colectivos, empresas, grupos musicales, trabajos discográficos, cinematográficos o literarios, edificios, estudios ingleses de desarrollo medioambiental, programas informáticos, gestores de correo electrónico... Hasta una universidad chilena se denomina Finis Terrae.

Este gusto por el nombre fue, precisamente, lo que motivó la elección para el portal coruñés. Ninguno de los tres autores (en estos años, han tenido más de 500 colaboradores) es de la localidad, aunque Louro nació en Quilmas-Carnota. «Nos gustó la denominación, esa fue la razón, sin más», confiesa González-Guitián, satisfecho por la decisión, siete años después.