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APPlicaciones peligrosas, intimidad en peligro: lo que dicen que es y lo que puede ser en realidad
Iván Parro
- Esta reflexión se centra en la estrenada app de las fiestas 2017, disponible para su descarga en cualquier dispositivo Android a través de Play Store de forma gratuita.
- La instalación de la app de las fiestas en nuestro móvil exige que le demos autorización a la empresa desarrolladora a acceder a nuestras fotos, contactos y demás datos personales
Es loable, necesario y muy de agradecer que las administraciones y poder públicos utilicen nuevas formas y medios para comunicarse con el ciudadano, ayudándoles a solventar problemas y dificultades y hacer más accesible y cómoda la comunicación entre ellos para realizar cualquier tipo de trámite o de consulta. Las nuevas tecnologías lo han permitido y universalizado. Nuestro Ayuntamiento de Béjar por fin se dio cuenta de cubrir y dar respuesta a esta necesidad a pesar de sugerencias y recomendaciones anteriores y está a punto de poner en funcionamiento una sede electrónica incompleta, con errores y con problemas de seguridad que si bien facilitará a los bejaranos solicitar certificados o realizar peticiones sin salir de sus casas debe por otra parte solventar y solucionar antes de la aprobación definitiva esos fallos que han detectado y alegado los grupos de la oposición con el fin de mejorar la sede electrónica y que los ciudadanos se sientan más cómodos y seguros en su relación con el Ayuntamiento a través de este medio. Pero esta reflexión se centra en la estrenada app de las fiestas 2017, disponible para su descarga en cualquier dispositivo Android a través de Play Store de forma gratuita.
Como otras tantas personas que imagino ya lo hayan hecho el otro día me dispuse a instalar dicha aplicación en mi terminal pero cuál fue mi sorpresa al ver que antes de iniciar la instalación me solicita permiso para acceder a mis archivos multimedia y a las llamadas e información sobre mi teléfono.
Si bien la idea de la app sobre las fiestas era necesaria y útil (a ver si el Ayuntamiento la aplica también en otros ámbitos, como propuso por ejemplo la Agrupación de Electores Tú Aportas Béjar con los bandos municipales) lo cierto es que a mi juicio es peligrosa y sospechosa porque puede vulnerar mi privacidad e intimidad, y por esa razón ni la instalé ni la instalaré con esas condiciones y requisitos en mi teléfono, ya que si hubiese pulsado sobre Aceptar en la pantalla que solicita el permiso para acceder a los datos de nuestro teléfono estaría autorizando a la empresa que la ha creado y desarrollado llamada Las Fiestas de (http://lasfiestasde.com) el acceso y utilización de datos, fotografías, vídeos, archivos, agenda de contactos, es decir, la autorización para consultar información privada de mi teléfono con la que luego podrían sin saberlo nosotros robarnos datos personales e incluso espiar lo que hacemos o lo que dejamos de hacer con él. Y este es el principal problema que yo veo y que planteo sin desmerecer ni mucho menos la iniciativa totalmente plausible de la aplicación: ¿por qué una app de información sobre fiestas locales solicita permiso para acceder a nuestro teléfono y poder controlar así lo que estamos haciendo con él?
Si pulsamos en “Información sobre permisos” claramente nos informan que la versión 2.2 de la aplicación las fiestas de Béjar 2017 que instalemos en nuestro teléfono puede acceder a consultar la identidad y el estado del teléfono, puede leer el contenido de nuestra tarjeta la cual contiene archivos personales o incluso puede modificar o eliminar sin previo aviso contenidos (cosa improbable que roza la ilegalidad pero para cual estamos otorgando permiso para ello directamente), ver nuestras conexiones de red, acceder por completo a nuestra red o controlar la vibración, aunque eso sea quizá lo de menos. En resumen, al instalar esta aplicación de fiestas o cualquier otra aplicación que nos solicite permiso para acceder al ID del dispositivo y los datos de llamada o que solicite el acceso a nuestros archivos estamos sin dudarlo en peligro y nuestra intimidad y privacidad pueden ser atacadas y vulneradas, eso sí bajo nuestro consentimiento, pero a veces, quizá muchas veces, sin el conocimiento o la información adecuadas. Repito que no es un problema de esta aplicación de fiestas en exclusiva sino de cualquier aplicación que nos solicite los permisos citados.
Debemos saber y prestar cierta atención a ello para no sufrir sustos ni sobresaltos de ningún tipo. Es una trampa de estas apps para robar nuestra privacidad porque en la mayoría de los casos no nos informan acerca del uso y la finalidad de los datos y permisos que solicitan, es decir, no explican de manera clara para qué quieren esos datos y cómo van a utilizarlos. Por eso debemos estar alerta ante este tipo de aplicaciones que piden y solicitan más de lo que necesitan.
Podemos evitar o controlar el acceso a estos permisos desde la opción Ajustes de nuestro teléfono pero es posible entonces que no podamos instalar la aplicación deseada. Es conveniente por ello protegernos con un software de seguridad actualizado que pueda realizar chequeos anti-malware a pesar de que a veces no es necesario un malware para robar o acceder a datos personales. También podemos revisar las aplicaciones que tenemos instaladas en nuestros teléfonos y los ajustes activados y desactivados. Y las grandes compañías deberían controlar mejor esto porque supone una grave amenaza a los usuarios, los cuales deben estar mejor informados acerca de los riesgos que corren ante estas vulneraciones a nuestra intimidad disfrazadas de legalidad sospechosa y encubierta.
Si las autoridades me permiten lanzo una sugerencia: para el futuro tengan en cuenta todo esto a la hora de plantear y desarrollar una aplicación. Y que esta forma de comunicación con la ciudadanía bejarana aumente y no se quede en algo anecdótico para este tiempo festivo sino que se puedan plantear otras aplicaciones de interés para todos. Finalmente aprovecho la ocasión para desear a todos mis vecinos bejaranos y afines unas felices y provechosas fiestas.
“Y almas y cuerpos al par/ en salud podrán cantar/ este su más dulce anhelo/ ¡De Béjar, al Castañar/ y del Castañar, al Cielo!”. (José María Gabriel y Galán)
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Tengo Android 7.1.1 y solo pide acceso a almacenamiento y teléfono, con lo cual no son demasiados permisos comparados con los que piden otras apps. Eso sí, no sé para que pide el de teléfono ¿para realizar alguna llamada a algún número de información? No veo la opción. La almacenamiento puede ser necesaria para almacenar los eventos favoritos (mi Fiesta) y alguna otra cuestión más.
Eso sí, siempre puedes, al menos en Android 7, quitar esos permisos una vez instalada y lo cierto es que funciona perfectamente.
Y, por cierto, no está diseñada para Android 7 aunque, como digo, funciona.
Gracias por las observaciones. Mi reflexión va en poner en cuestión la necesidad de solicitar permisos para la instalación de apps. Utilicé el ejemplo de la app de las fiestas como podía haber utilizado el de la linterna porque ¿para qué necesita la app linterna acceder al almacenamiento? Y por otro lado no se informa convenientemente de lo que van a hacer con los datos que recojan de nuestros teléfonos. Es una cuestión que está debatiéndose entre las grandes empresas y las asociaciones de usuarios que piden saber más y conocer mejor qué está pasando con esos datos a los que pueden acceder con nuestro consentimiento no informado. Y es que no dejan instalar nada si no se aceptan esos permisos, ¿por qué? Creo que hay bastante desconocimiento y desinformación sobre todo esto.
En todo esto yo creo que, en general, es falta de formación o de conocimiento de lo que tenemos entre las manos. Compramos el teléfono y nos ponemos a instalar apps como si nos fuera la vida en ello.
Lo primero que hay que tener en cuenta es que hay que descargárselas, siempre, de tiendas oficiales. Google Play Store parece que va aprendiendo y ya te analiza lo que tienes en el móvil por si hay alguna app peligrosa y que, incluso, puede haber sido retirada de la tienda por ello. Pero, a pesar de todo, con cualquier app que instalemos, debemos ir despacio cuando nos empiezan a pedir permisos y pensar, como bien dices, si una simple linterna pide permisos que no son razonables (el caso ya sabemos que es famoso y hoy en día en casi ningún teléfono moderno nos hace falta una app de linterna).
Pero, insisto, lo mejor es conocer previamente como funcionan básicamente estos aparatos y, no estaría nada mal, que vinieran con un manual de seguridad.
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