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Visiones de Béjar (40): Universidad y riqueza turística para la ciudad de Béjar
¡Hola, apreciados/as lectores/lectoras!, hoy, como lo prometido es deuda, si leen a menudo este semanario Béjar.biz, voy a tratar de enlazar este artículo con un comentario o entrada hecha por mí en uno de sus foros, ante la noticia de colaboración entre el Ayuntamiento de Béjar y la Universidad de Salamanca aparecida en este semanario el día 5 de este mes y de la que también se han hecho eco otros medios de comunicación, para tratar de llevar a cabo y desarrollar en Béjar cursos extraordinarios de la Universidad de Salamanca. Como pretendo ser constructivo, como siempre, por lo menos eso es lo que intento, voy a tratar de analizar la noticia con mi mejor disposición, pues la materia lo requiere.
Miren, tengo sobre la mesa de mi estudio tres libros, llevan por títulos: El Mecenazgo Literario en la Casa Ducal de Béjar durante la época de Cervantes, edición de J. Ignacio Díez; La Razón de la Sinrazón que a la Razón se hace, lecturas actuales del Quijote; estos dos primeros libros de la Fundación Instituto Castellano y Leonés de la Lengua; el tercero de los libros es un Inventario de Raúl Guerra Garrido, también del Instituto Castellano y Leonés de la Lengua. ¿Y a qué viene esto, se preguntarán ustedes? Pues muy sencillo: son libros con que nos obsequiaron en un curso de verano extraordinario de la Universidad de Salamanca, realizado en la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Industrial, allá por la primera quincena de julio de 2005, y denominado “El Mecenazgo Literario de la Casa Ducal de Béjar”, dirigido por nuestro paisano Gonzalo Santonja.
Recuerdo también un curso que realicé ese mismo verano, también extraordinario, del turismo de la nieve, al que también asistieron como ponentes, al igual que en el anterior curso mencionado, personas relevantes en ambos campos (el cultural y el turístico). Asistieron, por supuesto, numerosas personas de fuera en ambos cursos para realizarlos. Recuerdo poca gente de Béjar, por no decir que nadie, en los mismos.
Esto es un ejemplo de que se quisieron instaurar en Béjar, allá por el año 2005, las bases para que en nuestra ciudad hubiera y perduraran dichos cursos, cosa que no sucedió. Eran cursos eminentemente prácticos, costándome el primero, creo recordar, la módica cantidad de 10 € para estudiantes, el segundo de ellos, creo también recordar que fue más caro, al ser un curso más práctico, con varias salidas fuera de Béjar, siendo una de ellas a las instalaciones de la estación de esquí de la Covatilla.
Enlazando con el encabezamiento de este artículo, tengo que decir que me parece una idea estupenda el convenio firmado por el Ayuntamiento de Béjar y la Universidad de Salamanca, sobre lo que, evidentemente, pretende ser un campus internacional. Espero, quiero y deseo que, como dice la noticia, sea un campus de cooperación y colaboración, activo en todos los sentidos, donde tanto los ponentes como los participantes y organizadores se conviertan, después de estos cursos, en potenciales turistas que vuelvan a Béjar, podríamos decir, por su cuenta (los que sean de fuera) y arrastren a amigos y familiares, para lo cual debemos estar preparados, ya no solo pensando en turismo de dentro de las fronteras de nuestro país, sino de otros países y culturas.
A ver si entre todos, y cuando digo todos, no solo me refiero a la Universidad y el Ayuntamiento, sino también a los ciudadanos de Béjar -que yo creo que lo podemos hacer bien-, nos implicamos, por lo menos en dar ideas y en no criticar al prójimo por el mero hecho de intentar algo.
Por otra parte, no podemos, por poner un ejemplo, crear rutas de senderismo si no se hace un mantenimiento mínimo de las mismas, con la consiguiente repercusión que tendría para el gran paro que existe en nuestra ciudad, creando puestos de trabajo. Seguro que esos estudiantes que vengan, extranjeros o nacionales, y demás gente, lo sabrán apreciar y agradecer.
¿Se convertirán estos cursos de Campus de Excelencia Internacional en potenciadores económicos para Béjar y la comarca? ¿Crearán riqueza? ¿Servirán para cultivar más a la población “indígena” de Béjar? Yo respondería que sí en los tres casos. Por tanto, apreciados/as lectores/as, empecemos a sentar las bases desde ya, para que esto sea posible.
Atentamente,
Paulino Aliseda Hoya
Paalho68@hotmail.com
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Hola:
Estoy totalmente de acuerdo con esos cursos y otro montón de cosas que podrían hacerse para el turismo, creo que el mejor lugar para realizarlos es EL BOSQUE (con los arreglos necesarios claro está) y hablando de arreglos no estaría de más el mantenimiento de las rutas marcadas por los pinos, pues la de la cascada lleva años un árbol atravesado y ahora han caído otros dejándose tal cual, el merendero está totalmente abandonado con los bancos caídos y faltan algunas mesas de piedra, y los caminos parecen pedregales, cuando verdaderamente es un valor extraordinario ese monte que casi es un arboletum y faltan muy pocas especies arbóreas de C y L para serlo por completo, y sin embargo está abandonado sin sacarle ningún partido a los esfuerzos de nuestros antepasados.
Estoy totalmente de acuerdo de que un sitio idoneo para realizar dichos cursos, es el Palacete de El Bosque y sus aledaños. Yo ya me he pronunciado al respecto otras veces en mis artítulos. Además, tenemos los Pinos al lado para realizar todo tipo de actividades que pudieran demandar algunos de estos cursos, al mismo tiempo y como decía el invitado de 10:51, ahora está muy abandonado, a ver cuando de una vez por todas ponen en valor los dos recintos, El Bosque y Los Pinos, pués potencial para un buen uso lo tienen y de sobra.
aténtamente,
Paulino Aliseda
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