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La idoneidad de Béjar para el turismo no está tras la puerta de la cueva de Alí Babá
La idoneidad es una palabra en la cúspide de lo más satisfactorio de lo que sea. Lo mismo que un destornillador es lo más idóneo para colocar un tornillo, un cirujano es lo más idóneo para realizar una operación de corazón. En el caso del turismo, lo más idóneo es una infraestructura real, eficiente, visitada… que posiblemente fuera un chiringuito en una playa remota y que poco a poco se fue transformado en la Playa Idónea gracias a la voluntad de los implicados en un propósito serio.
No obstante, cuando un chiringuito a lo orilla del mar no traspasa en muchos años la frontera del éxito y de pronto alguien dice que la dichosa playa es idónea, pueden pasar dos cosas: que un proyecto de ese alcance esté sólo en la mente de quienes lo han concebido o que éstos cuenten con el sursuncorda para que lo haga.
La idoneidad de Béjar para el turismo es un buen deseo expresado de mala forma y un engaño al mercado a que está dirigido ese apelativo fantasioso. Esto no significa que la aspiración de los creadores de la “marca” no sea auténtica. Es lo mismo por lo que suspiran todos los habitantes de la ciudad, identificada ahora con un nombre anti turístico e ilusorio. Pero no es una cuestión de deseos. Como en el chiringuito de la playa, tendrá que ser creada una infraestructura que respalde esa pretensión, paso a paso. Y lograr que paulatinamente vayan en aumento las virtudes reales con el esfuerzo de todos los que sean capaces de pensar, de llevar al mundo difícil en que vivimos las ideas y de llevar a cabo las obras necesarias que, como se sabe, son buenos amores y no buenas razones.
Los argumentos sobre el entorno natural para lanzar una marca Béjar Idónea son los mismos que han existido siempre sin que se hayan aprovechado, entre otras razones porque ese entorno, al pelo, no reúne, ni remotamente, las condiciones para atraer visitantes como un imán sólo porque uno lo desee o lo imagine. Si en tantos años y tras tantas administraciones locales nunca se hizo, cómo pensar que con decir “¡Ábrete Sésamo!” podrían abrirse las puertas de la cueva de Alí Babá.
Fuera de ese encanto natural, la ciudad puede aspirar a una temporada de esquí al año sin que siquiera sea necesario que los que vengan se vean obligados a pasar por Béjar y a una villa y jardín renacentista en ruinas desde hace mucho tiempo. Los bares, los restaurantes y todo lo demás son infraestructuras que calzan el turismo cuando llega y que no atraen a nadie. Para que Béjar llegue a ser idónea turísticamente antes habría que forjar la idoneidad con atractivos realmente reales y valga la redundancia
Celebrar algunos eventos ocasionalmente es algo importante pero circunstancial y esporádico, lo mismo que las celebraciones religiosas, que en Sevilla son lo que son pero en Béjar no. Igualmente sucede con los museos: se viaja a París para ver el Louvre, pero no se viaja a Béjar para conocer ninguno de sus museos locales. Sólo después que el turismo llega por otras razones éstos se hacen rentables.
Tal vez lo peor de esta situación podría ser que nosotros mismos nos lo creamos y que no seamos capaces de ver lo único que vio el tío que abrió su chiringuito en una playa a la que nadie iba: en ese momento todo estaba por hacer. No en las divertidas ferias de turismo sino en casa, poniendo en ello hasta el último aliento. A él le iba la vida. Y a nosotros, también.
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¡Ya era hora de que alguien llame a las cosas por su nombre y que se atreva a decir que el Emperador está desnudo!
El turismo en Béjar es un engaño y la situación es la misma que en el conocido cuento de Andersen: un Emperador bobo, unos estafadores, una mentira y la ignorancia colectiva de un pueblo engañado y empeñado en negar la verdad a pesar de la evidencia.
Como en Béjar en ningún lao...
Sí. Pues si no es el turismo...va a ser la industria. Estais "apañaos".
Claro que no es la panacea pero yo no le veo mas salida a Béjar porque lo de la reindustrialización que se lo cuenten a Calleja el de los cuentos.
Claro que está todo por hacer...pero desde luego si a cada paso se le siguen metiendo palos a las ruedas del carro, no llegamos ni a la esquina. Nadie (casi) va a Cuba a ver museos, se va por las playas y otros atractivos...pues explotemos nuestra playa (la sierra) pero de verdad, a tope. Y no me refiero sólo a la nieve, me refiero a la nieve y a todo lo demás. (Ah por cierto no hablo de meterle el bulldozer a saco, ni tengo acciones en la estación, ni un restaurante ni tienda ni ná de ná)
Pero tranquilos...en cuanto sea Parque natural...se acabó la explotación, otro palo en las ruedas.
Imposible avanzar. Mejor residencias de ancianos que será para lo que quedemos y lo único que algunos iluminados consentirán. Sobre todo los que se creen en posesión de la verdad y la honradez.
Y sólo del puente hacia Los Praos, no vaya a ser que toquemos el orinal de Boabdil, que aquí es histórico hasta el traje del alcalde.
Lo que si es histórico es la desorganización que sufrimos. Hasta hace cuatro días mi familia que reside fuera de Béjar no podía ver el Bosque porque no abría los fines de semana, y hay hasta algun museo que solo gestionan voluntarios y cuando pueden...en fin.
Y por qué llevas a ver a tus familiares el Bosque y los museos? No son el orinal de Boabdil pero se le acercan. Mejor llévalos a ver los edificios de ladrillo del antiguo Tinte y le das una vuelta por el asfalto del parking de la Covatilla, no?.
Porque no soy tan inculto como aparento. Y es de lo poco que merece la pena ver en Béjar, las fábricas no les llaman la atención aunque se las he enseñado. Pero claro, vivir en una ciudad monumental les hace mirar por encima del hombro cierta arquitectura, no es por elitismo, es que es normal. De ladrillo eran unas chimeneas que por lo visto deben (debian) ser como la columna de Trajano. Y a la covatilla tambien los llevo (a hacer culiplas, el esquí nos viene grande económicamente).
Pues hombre las chimeneas trajanas de ladrillo son fiel testimonio de una determinada fuente de energía aplicada a la industria textil en un momento concreto, como lo fue antes la fuerza motriz del agua del río y más tarde la luz eléctrica. Esas cosas que nos explicaban ya en el colegio, ¿recuerdas? Fíjate si tiene interés educativo la cosa. Educativo y turístico. Te pondría aquí multitud de enlaces, pero me aburre hacerte el trabajo así es que googlea tú mismo "patrimonio industrial chimeneas" y jartate de ver asociaciones, trabajos científicos, ejemplos de aplicación turística etc que se curran en otros puntos de nuestra geografía. Ah perdón, que nos miran por encima del hombro y lo nuestro es menos... disculpa mí atrevimiento. Intentas tirar de ironía pero si, solo aparentas.
Que si que si...que es "mu" bonita la chimenea...hala. Lo dicho, aquí todo histórico...hasta la pelusa del ombligo.
Tu qué eres de esos que hacen turismo por otros lugares y vienes alabando y admirando lo de los demás y menospreciando lo tuyo?. Si Béjar no cuida su valores naturales, históricos y patrimoniales y no los pone en valor correctamente, qué turistas van a venir a la ciudad? Y a qué? A verte a ti?.
Bueno...yo tengo mi público no te creas....ja,ja,ja,ja.
Algo hago por el turismo de Béjar (y gratis). Lo que no me creo es que cualquier cagajón sea merecedor que figurar en el catálogo del patrimonio histórico. Pero es la opinión de un profano. Doctores tiene la Iglesia, y en arte mas.
En cuatro años Béjar tendrá 9.000 habitantes. 7.000 de más de 65 años.
Esto ni se menea ni se va a menear. Menudos dirigentes, nadie quiere quedarse aquí. Menudo trato. Como no seas palmero suyo mal te irá.
Y si, aquí no hay nada que merezca la pena ver. Y lo poco que se podria ver está al filo de desaparecer.
Ostras!!! Y yo seré uno de ellos, tengo ahora 62.
Lo que no entiendo bien es la bajada de 13.950 de ahora a 9.000 dentro de cuatro años.
¿Eres adivino?
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