Bajo licencia de Creative Commons.
Crónicas hispano-cubanas: Pepe el Mallorquín
Entre los personajes de fábula en la isla de las fábulas hay uno que destaca en la memoria colectiva y al que el boca a boca le ha labrado el sitial que ocupa en la tradición oral del occidente del país: una especie de Robin Hood que se adueñó de una isla y le hizo la guerra a los ingleses.
Algunos dicen que habría que estar loco para hacer lo que él hizo: se adueñó de la segunda isla del archipiélago cubano --tan grande como Mallorca-- desafiando al Capitán General Nicolás de Mahy y Romo y a Fernando VII por carambola; aunque generalmente dicen que estaba loco por otra razón: declararle a guerra a Jorge IV Rey del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda y rey de Hannover; aunque, en realidad no declaró nada sino que atacó, hundió y saqueó un buque de Su Majestad Británica y le declararon la guerra a él.
Estamos hablando de un personaje que debía llevarlos en carretilla para nacer en Mallorca, irse a Cuba a principios del siglo XIX, asentarse en un puerto pesquero del sur, explorar y controlar un extenso territorio marítimo poblado por cientos de cayos, isletas y la segunda Isla de la que ya hablamos, crear una flotilla con ligeras goletas de pesca, dominar la navegación por el sur de Cuba y hacerse pirata cuando los piratas ya no existían.
La isla en cuestión, por entonces, había tenido diferentes nombres que se solapan en la historia; uno de ellos fue La Isla del Tesoro; porque siendo un importante territorio español fuera de control por el gobierno de La Habana, había sido el refugio idóneo de los más afamados piratas de todos los tiempos, comenzando por Jean Francois La Roque en 1543 y pasando por John Hawkins, Sir Francis Drake, Pieter Pieterzon Hayn (el famoso Pata de Palo), Francis El Olonés, Henry Morgan y muchos otros que hicieron de aquel territorio despoblado un lugar seguro; pero ya en 1820 la piratería era historia, aunque la isla continuaba teniendo las mismas virtudes geográficas que tuvo para sus protagonistas.
En torno a 1821 el personaje de fábula era quien controlaba esa llamada Isla del Tesoro con sus 3.000 kilómetros cuadrados y su gran ensenada al sur, abierta a la mar profunda. Se declaró protector de ella y emprendió su empresa imposible, que tal vez España interpretara como otro conato de independencia de una parte de otro territorio español en América.
Vale aclarar que el personaje del capitán Jack Sparrow que Johnny Depp ha encarnado en el cine representa a los Piratas en el Caribe; porque el único Pirata del Caribe real y auténtico se llamaba José Rives, conocido en la vida y en la muerte como “Pepe el Mallorquín”.
Continuará... si os pareciera interesante.
- Crónicas hispano-cubanas: El primer ferrocarril de España
- Crónicas hispano-cubanas: "Madame Corina, la entrañable amiga"
- Crónicas hispano-cubanas: "La Reconcentración de Weyler"
- Crónicas hispano-cubanas: El primer día de la República de Cuba
- Crónicas hispano-cubanas: La Pepa y el abre y cierra del ataúd de Cristóbal Colón
- Asì nos va.
hace 13 horas 8 mins - El asunto tiene una
hace 2 días 7 horas - Una aproximación
hace 2 días 12 horas - Eso es. A trabajar
hace 2 días 15 horas - Los DOS verdaderos
hace 3 días 14 horas - Vamos a ver que lo del
hace 4 días 6 horas - Pues si que han aprendido de
hace 4 días 6 horas - Cuánto ha costado esta
hace 4 días 13 horas - A ver si nos quedamos sin
hace 4 días 14 horas - Puri, venga, échale huevos
hace 4 días 18 horas
Ándalepues.
Enviar un comentario nuevo